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El Barcelona ha remontado el 2-0 de la ida con un 3-0 para el que ha necesitado la prórroga.

Lo tenía difícil el Barcelona para remontarle la eliminatoria al Sevilla tras el 2-0 de la ida. Pero los de Koeman ha salido al campo decididos a por la victoria y, aunque se les ha resistido hasta la prórroga, se ha colado en la final del próximo 17 abril. Un Barcelona muy superior al Sevilla en todo el partido se adelantaba con un golazo de Dembelé en el minuto 13. Pudo ampliar la ventaja el Barça antes del descanso.

Tras la salida de los vestuarios el Sevilla controló más el partido y frenó el ímpetu del Barcelona. Los de Lopetegui desperdiciaron un penalti en el minuto 71: Ter Stegen paró el tiro de Ocampos. No fue hasta el 94', después de que Fernando viese la segunda amarilla, cuando Piqué, de un cabezazo, mandó al partido a la prórroga. En el tiempo extra, Braithwaite ponía el tercero que llevaba a su equipo a la final que se le escapaba al Sevilla mientras se lamentaba de una mano de Lenglet no señalada por el árbitro. La pelota antes le había dado en el pecho y desde el VAR consideraron que no era pena máxima.

Día de la Mujer, en directo | Tensión entre Policía y feministas en una manifestación sin autorización en Madrid

El Día de la Mujer transcurre este 8M sin manifestaciones en Madrid, tras la prohibición por el "alto riesgo de contagio"

España vive un Día de la Mujer atípico. Frente a las marchas multitudinarias que inundaban Madrid los últimos años, hoy las reivindicaciones tienen lugar sin ninguna manifestación en la capital, tras la confirmación de los jueces de la prohibición acordada por la Delegación del Gobierno por el "alto riesgo" de contagio, primando el derecho a la salud y a la vida frente al de reunión.Una encuesta de Sigma-Dos para EL MUNDO revela que siete de cada 10 mujeres y hombres piensan hoy que el año pasado fue un error celebrar las manifestaciones el Día de la Mujer porque ya comenzaba a haber contagios por coronavirus.

El Athletic se abona a la final de Copa

En demasiadas ocasiones se abusa de los calificativos grandilocuentes. Pero tanto para el Levante como para el Athletic esta semifinal era, en verdad, histórica. Los granotas se jugaban su primera presencia en una final en 112 años de historia. Para los leones se abría la posibilidad de pelear por dos consecutivas y convertir el año en irrepetible. La resolución resultó igualmente épica, con la enésima remontada del conjunto vasco en la competición y la pizca de suerte necesaria para decantar este tipo de partidos. No hubo nervios en el inicio, sino muchas ganas por morder cuanto antes, algo que los dos equipos pagaron después. Obligados por el resultado de la ida (1-1), los de Marcelino tomaban la iniciativa ante un Levante que se dejaba hacer, protegido en una defensa de cinco. Raúl García dio el primer aviso con un disparo que se marchó desviado, pero enseguida los atacantes levantinos empezaron a hacer diabluras. El mayor peligro llegaba por la izquierda, donde Morales parecía ganarle la partida a De Marcos. Así surgió el primer gol, con una triangulación en la que la defensa vasca se mostró más bien blandita. Roger, dentro del área pequeña, aprovechó un pequeño resbalón de Unai Núñez para revolverse y rematar a la red. Ese gol no hizo sino aumentar las revoluciones de un partido que ya se movía a buen ritmo. El Athletic dio un paso al frente y logró la igualada también a la carrera, con pundonor. Williams inició un contragolpe en el que Raúl García, cada vez más rápido, más alto y más fuerte, acabó en el suelo dentro del área tras recibir un placaje de Duarte. La pena máxima era inapelable. Y también lo fue el lanzamiento del navarro, potente y escorado, inalcanzable para Aitor Fernández. En apenas media hora los dos equipos habían expuesto argumentos para convertirse en dignos finalistas. Y aún quedaba un mundo. Un mal despeje de Yerai golpeó en el palo de la portería de Unai Simón y de nuevo metió el miedo en el cuerpo del Athletic.